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Los tiempos han cambiado y el diseño de las sombrillas que siempre hemos llevado a la playa ha evolucionado. Utensilios nuevos como las carpas ofrecen competencias mucho más cómodas y de mayor utilidad que responden a nuestras necesidades reales.

Lo primero que se le pide a un accesorio para la playa es que proteja completamente de los rayos del sol, y para ello necesitamos un recubrimiento mayor que el que proporciona una sombrilla. Por esta razón, cada vez es más común ver una marea de carpas plegables en un día de excursión a la playa. Una carpa asegura una mayor protección de los rayos de sol y nos va a permitir una inmensa comodidad, ya que su amplio espacio interior se puede para descansar o mantener todas las pertenencias resguardadas.

Todo a la sombra y en primera línea de playa

Las carpas de playa van asociadas a un descanso vacacional sintiendo la brisa del mar y con la intimidad y protección tanto del molesto sol en las horas de mayor intensidad como del viento en los días en que este haga presencia, para así poder aprovechar de verdad el día de playa.

Ese descanso en el que cerrar los ojos y disfrutar del sonido de las olas es posible cada vez que vamos a la playa si contamos con esa protección. El escollo de las carpas y las grandes sombrillas podría ser el hecho de tener que cargarlas al maletero del coche junto con el resto de accesorios. Es la razón por la que algunas personas eligen playas en las que poder alquilar una sombrilla o palapa, pero se da el caso de que en muchas ocasiones están todas ocupadas, los precios son muy elevados o simplemente no son suficientes para cubrir nuestras necesidades. Para ello, tenemos la opción de carpas plegables que podemos cargar cómodamente en el vehículo y montar de manera muy sencilla para así estar protegidos del sol.

Mayores competencias

Carpas pequeñas que son muy manejables y que nos van a permitir además tener nuestras pertenencias resguardadas del sol, el viento o la arena. Son una solución fenomenal para disfrutar con familia o amigos y su peso es muy reducido. Y es que estas carpas no requieren un complejo anclaje ni ensamblaje; podemos abrirlas y colocarlas en un corto tiempo y plegarlas en el momento de marcharnos sin necesidad de emplear tiempo en quitar los restos de arena como ocurre con otros tipos de artilugios de protección.

De este modo podemos disfrutar de un maravilloso día en la playa cuando queramos y en el lugar escogido en el que siempre tendremos nuestro propio espacio en el que estar a cubierto. Otra de las ventajas es que estas carpas plegables están fabricadas en un material resistente que soporta mucho mejor que la sombrilla al uso los embistes del viento, por lo que se trata de una mejor inversión, ya que la carpa va a durarnos más en el tiempo.

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