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Sin embargo, la climatología puede ser, en muchas ocasiones, un factor limitante. Las lluvias o, en su caso, un sol demasiado fuerte, puede hacer que pasar el rato en nuestro patio o jardín no sea tan agradable.

Una solución perfecta para esto son las carpas para jardín, un recurso simple, pero efectivo que nos ayudará a sacarle el máximo partido.

Carpas para proteger del sol

Contar con una carpa pequeña para jardín es una forma sencilla y económica de poder disfrutar nuestro espacio al aire libre durante la época de estival. Si no contamos con un porche para guarecernos del sol directo, estar a la intemperie puede resultar desagradable, además de nocivo para nuestra salud, especialmente durante las horas más calurosas del día. Por eso, una solución sencilla es instalar una carpa que nos aporte sombra y frescor. Así podremos maximizar el tiempo de uso de nuestro jardín durante la primavera y el verano.

Carpas para los días de lluvia

Durante la primavera y el otoño, hay días que pueden sorprendernos con una lluvia repentina mientras disfrutamos del aire fresco en nuestro patio o jardín. Si aun así queremos seguir disfrutando del aire libre sin que la lluvia nos agüe la fiesta, una carpa para patio o jardín nos ayudará a protegernos de la lluvia sin tener que meternos en casa. Además, mantendrá a salvo de la lluvia nuestra comida u objetos personales.

Carpas como elemento estético

Además de sus aplicaciones prácticas, no tenemos por qué renunciar a la estética en nuestra carpa. Existen multitud de modelos en distintos estilos, colores y tamaños, que pueden aportarle a nuestro jardín un adorno estético interesante. Una carpa nos puede ayudar a crear un espacio tipo chill out que renueve el aspecto de nuestro jardín o patio.

¿Qué tener en cuenta a la hora de elegir una carpa?

  • Espacio disponible

Una carpa de jardín demasiado pequeña hará que desaprovechemos el área de jardín que quede fuera de su resguardo. Por otro lado, una carpa muy grande no podrá ser instalada dentro de la zona que teníamos prevista. Es importante medir bien el espacio disponible con antelación para asegurarnos de adquirir el tamaño adecuado.

  • Uso

No es lo mismo elegir una carpa de jardín para emplearla de manera ocasional, cuando queramos huir del sol, que una cuyo propósito sea proporcionar sombra durante eventos, u otra para utilizar durante todo el año como porche. El uso determinará el tipo de carpa más adecuada a nuestras necesidades, así como los materiales y el diseño.

  • Presupuesto

Nuestro presupuesto disponible será, en última instancia, el que marque el tipo de carpa que podremos comprar. Es relevante tener en cuenta que los modelos más baratos no son siempre los más adecuados, ya que pueden estar fabricados con materiales menos resistentes pensados para no ser usados con demasiada frecuencia. Lo mejor es adaptar nuestro presupuesto en función de nuestras necesidades.

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